MEMORIA MALA

   DISFRUTO LA FUNCIÓN

POR: Dalia María Teresa

A colación con el virus que surgió y nos acosó en el 2020 de manera mundial, ésta puesta en escena recrea a manera de la MEMORIA MALA la mortandad que se extendió, infiltrándose en cada casa, cada hogar, cada rincón, con su desolador manto oscuro.

Episodio que dejó marcas de desconsuelo sumergidas en el duelo y el miedo ante lo impredecible, implacable y en otra hora desconocido. Es así como se registró el suceso dejando huella, no tan sólo en la historia, sino más allá, infiltrándose incluso en el arte, como es el caso de ésta puesta en escena original de la dramaturga Adriana Reséndiz.

Bajo la excelente dirección escénica de Víctor Carpinteiro, la obra retoma vida en un monólogo ejecutado por la gran actriz Ángeles Marín, quien en escena muestra sus grandes dotes histriónicos.

-A finales de marzo 2020 el mundo se convulsionó por un virus sin nombre. Poco tiempo después, el mundo lo identificó como el COVID.

Muertes de familiares, amigos y conocidos por todos lados. El arte reaccionó y esta pandemia quedó registrada en la música, el cine, la pintura y el teatro. (texto en cartelera teatral).

Musicalizado por Pacheco, quien ocasionalmente canta y utiliza su voz a manera del formato escénico de “Voz in Off” la actuación estelar de Ángeles Marín sobresale, actuando de manera versátil en el sentido en que caracteriza una serie de personajes, que va interpretando acorde con la dramaturgia de Adriana Reséndiz, quien en su obra, hila y deshila breves recuentos de historietas que puede el público identificarlas como casi propias, o por lo menos, reconocerlas con cercanía a través de la MEMORIA MALA.

Montaje escénico en un solo acto de 60 minutos y cuadro escenográfico en donde Ángeles Marín aparece ataviada con un bello vestido que manipula y muestra con soltura, pareciendo que va marcando la extensión de su falda, las diferentes escenas.

La muerte en torno, es la temática medular que aborda el texto, en donde surgen recuerdos de una pareja sentimental, el padre, la madre, el hermano o descendientes.

Todo ello en una representación unipersonal, en donde la modulación de la voz, y el cambio de matizaciones del texto, junto con movimientos tanto corporales como faciales, marcan la diferencia de cada personaje a interpretar.

MEMORIA MALA se presenta en días sábados en uno el Circulo Teatral.