EL BANQUERO ANARQUISTA

DISFRUTO LA FUNCIÓN

POR: Dalia María Teresa De León Adams



Original del afamado escritor portugués Fernando Pessoa la puesta en escena EL BANQUERO ARNARQUISTA se presentó en breve temporada, es decir en dos únicas funciones de manera presencial en “El Circulo Teatral” bajo la dirección artística del también dramaturgo mexicano Luis Mario Moncada de quien le comentaré de paso, fuese galardonado con el “Premio de La Juventud” en 1985.





Excelente puesta en escena que la misma Compañía del Círculo Teatral expresó a manera de sinopsis, para ser exhibida en su cartelera teatral la siguiente consideración al respecto:

A partir de una conferencia escénica, el montaje pretende poner en jaque las ideas preconcebidas y simples de algunas ideologías políticas.

En el escenario un hombre elegante y adinerado presume su experiencia de ser uno de los anarquistas más radicales, en 60 minutos exprime al máximo la retórica pessoana y confronta el ruido de nuestras ágoras virtuales, llenas de especialistas de la nada que compran discursos que no entienden para presumir en un twit o un pie de foto.

Recordemos sobre el dramaturgo de la obra EL BANQUERO ANARQUISTA como a-priori he mencionado, es el icónico escritor Fernando Pessoa, nato en Lisboa, Portugal en el año de 1888, quien fuera reconocido por sus heterónimos, es decir, por sus múltiples personalidades que adoptara a través de su vida, quien por ende se registrándose como un autor poseedor de diversos apelativos.

Algunos de los nombres que registrara fueron el de Alberto Caeiro.  Alexander Search, Álvaro de Campos, Bernardo Soares y Ricardo Reis. Su alcoholismo le llevo a sufrir de la cirrosis hepática que le causó una muerte un tanto prematura.

Con respecto a su obra EL BANQURO ANARQUISTA se presentó a manera de monólogo, el cual fue ejecutado por el actor David Hevia quien demostró grandes dotes actorales en el escenario al caracterizar el rol protagónico con gran maestría y emotividad, por lo que logró poner de pie a una parte del público presente, quien le ovacionó con un cálido aplauso.

El texto está lleno de retoricismos en torno a diversas connotaciones con respecto a lo que podemos entender por anarquismo, que el mismo autor introdujo para con ello llevar al público a las múltiples contradicciones que dicho término lleva implícito, lo cual permite que el actor cuestione al espectador, con respecto a la temática a tratar, haciéndolo coopartícipe en algunos momentos escénicosdurante la función.

Respecto al vestuario, el personaje se encuentra ataviado elegantemente, bebiendo chapagne y fumando puro, en aparente contradicción al intento de abolir las desigualdades de clases y el abuso capitalista, es decir, a la postura que comúnmente opta el personaje para manipular mediante diálogos de indole sofista hacia sus oyentes.

Esta es una contradicción que el mismo escritor propone en aras de la reflexión; sin embargo, el actor en cierto momento de la obra cambiará sus ropas por otras de apariencia común o proletaria, mostrando su espíritu aparente pro-populista de libertad y equidad, para con ello poder convencer que es EL BANQUERO ANARQUISTA.

Por ello, en una de las páginas WEB de manera textual se puede leer con respecto al texto de  Pessoa los siguientes párrafos textuales:

-“Un hombre elegante y adinerado presume ser uno de los anarquistas más radicales; en 60 minutos exprime al máximo la retórica Pessoa y confronta el ruido de nuestros ágoras virtuales, llenas de especialistas de la nada que compran y compartn discursos que no entienden para presumir en redes sociales.

EL BANQUERO ANARQUISTA forma parte de lo que algunos llaman cuentos de raciocinio, otros “sátira dialéctica”, característicos de la escritura de Pessoa, quien desarrolló un cuento que se interna por los grandes problemas políticos de su tiempo y, en realidad de todos los tiempos, en que se toca la libertad individual, el Estado, las servidumbres de la acción política y la naturaleza de las leyes.”-

En cuanto a la escenografía de la obra de EL BANQUERO ANARQUISTA le diré qué en el montaje aparecía una silla y una mesita sobre la cual se ubicaba una botella de champagne y un gran puro. Artefactos de utilería que se presentan a propósito a manera de una perspectiva simbólica sobre la trama, que matiza al banquero rodeado de lujos y éxito económico que comúnmente el hombre rico adquiere haciendo gala de dichos objetos lujosos de placer, ¿cómo símbolo de opulencia?

Pus bien, finalmente le diré qué la obra teatral de EL BANQUERO ANARQUISTA había sido presentada en diversos foros teniendo como actor protagónico a el actor David Hevia, sin embargo, su talento y emotividad se muestra cada vez va más en ascenso.

 





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