KATSUMI
Y EL DRAGÓN
Por:
Dalia María Teresa De León Adams.
La
esperanza es la guía en éste viaje es la frase
a manera de consigna de la obra teatral infantil Katsumi
y el dragón cuyo simbolismo forma parte de éste cuento que muestra
una parte de la idiosincrasia japonesa en torno a la valía de un guerrero samurai.
La lucha contra el mal se libra mediante el espíritu valiente de una joven
aldeana.
En
el texto se muestran valores de dicha cultura en donde el Samurai, con su fuerza,
fortaleza, dignidad y ética, nos transporta al mudo mágico milenario del Japón,
lográndose con la ambientación musical y un vestuario típico.
La
Compañía “Raíces Tejidas”, “TRIBU Producciones” e “Incubadoras de Grupos teatrales” son
los equipos creativos encargada de ésta peculiar puesta en escena, la cual no
cuenta con diálogos hablados, de tal modo que es presentada a manera de teatro
mudo, en donde el simbolismo retoma un gran peso escénico.
La
obra es caracterizada por cuatro actores en escena, quienes ejecutan tanto
movimientos corporales con cadencia rítmicos y visajes o expresiones faciales
que asemejan a el andar peculiar de los nipones. Todos ellos bajo la dirección
artística de Andrea Salgado.
La
trama presenta a una leyenda tradicional japonesa bajo la adaptación de Dafne Itzammá Fuentes y Nydia Parra, quienes nos introducen al mundo
mágico oriental tan seductor para nuestra sociedad, por su sabiduría milenaria,
así como por su forma de vida tan peculiar ante nuestros ojos.
-“Katsumi
emprende un viaje con su amigo dragón para recuperar el sable que mantiene el
equilibrio en su mundo. A través de su viaje se enfrentará a diferentes pruebas
y obstáculos que la ayudarán a reforzar los valores adquiridos durante los
entrenamientos cos su abuelo samurai. Al final, Katsumi descubrirá si se
convertirá o no en una gran guerrera samurai.”- Dafne Itzammá
Katsumi y el dragón
tiene la peculiaridad de tener como personaje protagónico a una mujer, quien se
convertirá en samurai. Aspecto extraño, si recordamos que la imagen de la mujer
sumisa y sometida, no tan sólo ha existido en nuestra sociedad occidental, sino
que también ha imperado por milenios en el mundo oriental.
El
cuento nos acerca a la usanza secular del mundo oriental, en donde también se
da cabida a la maldad, caracterizada en escena por un pájaro negro, quien
intentará obstaculizar el camino Katsumi y el dragón.
La
puesta en escena cuenta como a-priori he mencionado, con los arreglos a cargo
de Frida Tovar y la misma Dafne Itzammá Fuentes, el vestuario y
maquillaje son de Shanat Cortés,
en tanto que el diseño sonoro y la musicalización corren a cargo de Nydia Parra y, la coreografía es
presentada por Mari Sano quien propone movimientos
totalmente oriundos del Japón.
La
puesta en escena como un plus, introduce también cuenta con la introducción de
títeres o muñecos de papel maché, los cuales son presentados a manera de personajes
secundarios, con excepción del dragón, quien acompaña a Katsumi en su odisea
retomando también un papel protagónico al ser caracterizado por un actor.
Bajo
la dirección escénica de Andrea Salgado
actúan los creativos de “Incubadoras de
Grupos Teatrales, Dafné Itzamma
Fuentes como Katsumi, Nydia Parra
caracterizando al dragón, como un Ninja Mario Esteban
Martínez Delgado y Jorge Pablo
Saldaña Santamaría, siendo es Sensei y quien manipula el títere del
zorro, los peces koi y la grúa, además de actuar en el rol de Sensei.
La
obra se presenta para toda la familia en el Centro
Cultural Helénico a partir del 20 de marzo en función matutina,
teniendo planeado concluir con las representacionesel día 23 de mayo. En ésta
ocasión está ubicado en el espacio abierto de la Capilla
Gótica del Centro Cultural
Helénico, y digo en ésta ocasión, pues ya años atrás Katsumi y el
dragón se había montado en el Teatro Sor Juana Inés de la Cruz, en
el Centro Cultural de la UNAM.
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