UN TRANVÍA
LLAMADO DESEO EN LÍNEA, EXCELENTE OPCIÓN
Por Carmen Zavaleta
Sin duda uno de los grandes bocados teatrales que se ofrece esta
semana es el montaje de Un tranvía llamado deseo de Tennsse Williams, protagonizado por Gillian Anderson, Vanessa Kirby y Ben Foster y que estará disponible hasta el próximo 28 de mayo en el ciclo
gratuito “National Theatre at Home”, que ya nos ofreció maravillas como “Frankeinstein”.
No está de más decir que el ciclo es una excelente oportunidad
de ver teatro de alta calidad, con actuaciones que resultan una clase de
interpretación: mujeres y hombres absolutamente encarnados en sus personajes y
con un trabajo de construcción impecable.
Un tranvía
llamado deseo es una co- producción de Young Vic y Joshua Andrews y está dirigida por Benedict
Andrews quien con una mirada contemporánea nos introduce al mundo
decadente de “Blanche DuBois”, su encuentro con su hermana “Stella” y su cuñado
“Stanley Kowalski” en Nueva Orleans.
El montaje se desarrolla en la época actual, con excelentes
resultados. La propuesta se presenta en un escenario que gira conforme avanza
la trama; ahí se sitúa el departamento de “Stella” un espacio habitado por
muebles blancos, sin paredes y lleno de transparencias que dejan a los
espectadores a expensas de los personajes. La iluminación va de lo brillante a
la oscuridad, acentuada por el azul y el rojo, en muchas de las escenas y que
nos revela el interior de los protagonistas. En conjunto los elementos
creativos que incluyen la música y el vestuario, además del trabajo actoral, nos
ofrecen un re lectura del clásico del realismo norteamericano que indaga sobre
el erotismo, la atracción animal, el alcoholismo, los prejuicios ante la
migración y la pérdida del estatus. No se la pierdan, el link para acceder es https://youtu.be/BJEpYaD3yTw.
Por cierto, el acceso a National Theatre at home es libre, pero la
plataforma da la opción de donar a la institución para apoyarla en esta época.
El montaje se transmite en inglés y es recomendado para adolescentes y adultos.
Escena en red… El Centro Cultural Helénico no para en estos días,
entre sus actividades ofrece talleres en línea de dramaturgia y dirección escénica
y ha lanzado convocatorias que buscan apoyar al gremio teatral e incentivar el
trabajo creativo en tiempo de pandemia adaptándose a las necesidades que el
momento marca, lo que es un acierto y una necesidad. Los trabajos que se han
presentado en este campo nos permiten tener una fotografía digital de los días
que vivimos (y que un día serán recuerdo, esperemos), vamos, están documentando
el día a día desde la trinchera creativa. Una de las convocatorias que lanzaron
fue Dramaturgia del confinamiento que ofreció tres primeros lugares con un
premio económico. El primer lugar fue para Sobre abundancia, sobre carencia. Bitácora
del confinamiento o dramaturgia para no montarse de Raúl Valles González de Chihuahua; el segundo lugar Excepto un pájaro” de Valeria Fabbri
de CDMX y el tercer lugar fue para Johnny Blade meets Ray Bradbury de Aristóteles
Lara Bonfil de Xalapa, Veracruz.
Quiero detenerme en el trabajo de Valeria Fabbri, actriz y
dramaturga quien en pocos años nos ha dado muestras sólidas de su trabajo, con
una pluma que madura a cada paso y en donde los temas como la pérdida, el
duelo, la muerte y la esperanza van de
la mano; tuve la oportunidad de leer Excepto un pájaro y el texto sigue esta línea,
nos plantea la historia de un hombre mayor que se enfrenta a la pérdida de su
vida tal y como la conocía; un relato
que nos recuerda lo vulnerable que somos y con qué frecuencia nos damos a la
tarea de romper nuestros lazos familiares, una fotografía de nuestros días en
el encierro. Felicidades.
Fotografía: Valeria Fabbri |
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