Disfruto la función por Dalia de León


ESPERANDO A GODOT

Por: Dalia María Teresa De León Adams.

Una de las obras del genero del absurdo que ha sido representada en muchas ocasiones en diferentes escenarios del mundo, es la obra Esperando a Godot. Su escritor evidentemente sería galardonado con el premio Nobel de Literatura. Me refiero al inminente dramaturgo irlandés Samuel Barclay Bekett (Foxrock, Irlanda 1906-1989) cuya obra magnánima la escribió en el año de 1953.

Fotografía otorgada por el Centro Cultural Helénico 


Curiosamente en su momento sólo tuvo un éxito relativo tal vez porque el publico aún no identificaba al autor, o por la incredibilidad que se le otorga a las nuevas creaciones del momento, aunados al deterioro moral y económico que en Europa dejaba el padecimiento de dos guerras mundiales.  

Esperando a Godot constituye la obra más representada del crítico, novelista y poeta Samuel Beckett, nombre con el cual es conocido en el medio teatral mundial. Escritor nacido en Dublín en el año de 1906, quien muere en Paris en1989. Actualmente es reconocido como un valuarte del experimentalismo literario dentro del modernismo anglosajón del siglo XX.

Esperando a Godot pertenece al género del absurdo (aunque a veces ha sido considerada como tragicomedia) por el tratamiento que Samuel Beckett le infirió a su teatro denominado estático, en donde no hay acción ni trucos escénicos, más que personajes esquemáticos. De tal modo que Esperando a Godot actualmente constituye un ícono dentro de las obras teatrales de su género.

La obra Esperando a Godot pisa por supuesto escenarios mexicanos y esta por cerrar temporada el próximo lunes 16 diciembre de 2019 en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, lugar en el cual se ha estado representando desde el día 4 de noviembre.

Esta puesta en escena no cuenta mas que con unas ramas de árbol como apoyo escenográfico, pues con apego al texto, no se necesitaba realmente un montaje escenográfico, pues en realidad la dramaturgia en donde lleva un gran peso escénico es tanto en lo histriónico, como la estructuración de los diálogos los cuales conllevan una cierta dosis de locura y de sapiencia, así como de desaliento ante la vida difícil de dos hombres que han vivido largos años careciendo de todo y, quienes se encuentran con otros seres aún más olvidados de la mano Divina.

 La trama presenta a dos vagabundos, a Vladimir y Estragón quienes sin una razón realmente de peso, se dan a la tarea de esperar a un tal Godot, personaje en torno al cual surge la dinámica teatral, el cual nunca acaba por aparecer. Ambos vagabundos ventilan sus vivencias y miserias padecidas, bajo una tónica de cierta ingenuidad y desaliento.

Los personajes protagónicos tras de dialogar y divagar, verán llegar a otro tercer vagabundo, quien aparece junto con su esclavo quien empero a la pobreza en que vive, desarrolla una gran destreza oportunista y maliciosa.

Los actores protagónicos les interpretan con gran plástica actoral, demostrando tener grandes tablas en el escenario. Ellos son Carlos Mendoza, Gerardo Martínez, Evaristo Valverde y Sergio Acosta, todos ellos magníficos actores quienes comparten créditos actorales con Alicia Jiménez, una actriz que aparece como personajes complementarios en el cierre de la historia.

La trama es intensa en su tratamiento psicológico y muy cruenta a la vez, en cuanto a dibujar perfectamente la miseria al extremo que no tan sólo es económica, sino además existencial; peculiaridad que se muestra en tantas otras de las obras de Samuel Beckett, que le han hecho emblemático y denunciador de la injusticia social. Sin embargo, en ésta puesta en escena, toma otro matiz bajo la interesante adaptación del texto y dirección artística de José Luis Cruz.

Esperando a Godot se presenta solamente los días lunes en horas de las 20:30 horas en el Centro Cultural Helénico.



Comentarios